Un chef bien adobado

Desde metros de distancia podía verse con toda claridad el volumen de dimensiones extravagantes en la librería Crisol de Lima. De tapa negra, recién impreso, será presentado en sociedad este fin de semana. El tema está anunciado en grandes caracteres: Gastón Acurio y ‘500 años de fusión’. Es improbable que otro chef latinoamericano tenga un libro tan grande. Alrededor del mesón donde está expuesto hay un aroma a sobredosis mediática. Comienzo a hojearlo sin ganas porque no me gusta como producto, pero el personaje si me cae bien. Y aunque no lo voy a comprar, debo confesar que el libro no me indigestó. El temor de que fuera un recetario quedó disipado, tampoco me pareció petulante y mucho menos molecular, que son dos plagas del mundo de la cocina moderna.

Este ‘libro negro de Gastón’ contiene montones de fotos y unos textos agradables que relatan vivencias, experiencias, sensaciones sobre preparaciones, ingredientes, cocinas, relaciones. Los platos son comentados, más que explicados. Ahora, aunque las fotos están buenas, siempre que veo este tipo de libros pienso que lo compraría si fuera sólo de texto y en tamaño de bolsillo, como los del chef Anthony Bourdain, por ejemplo. Este es un libro de mesa, condenado a ser revisado pero no leído, demasiado pesado para manipularlo, y con un gasto en papel en tinta que provoca calambres ecológicos. Pero podría ser peor.

Será presentado en una feria gastronómica de Lima y sin duda contribuirá al mito del chef. Hace poco, un artículo en el diario ‘El Comercio’, dio algunas luces y dólares sobre los componentes de este mito. Los restaurantes de la empresa de Gastón han demandado inversiones por 30 millones de dólares y este año venderán unos 60 millones. Entretanto, este evangelizador de la cocina peruana no se detiene y prepara nuevas inversiones por 90 millones de dólares en restaurantes en diversas partes del mundo el próximo año. Le preguntan sobre el futuro: «no me preocupa». Faltaría más.

Así que el libraco está dedicado a un chef que tiene abiertos restaurantes ‘Astrid y Gastón’ en siete ciudades y prepara dos más; cebicherías ‘La Mar’ en cinco ciudades (las últimas en Santiago y San Francisco) y proyecta siete más en EE.UU., Londres, Sao Paulo y Dubai; y sangucherías Hermanos Pasquale y restaurantes Tanta en Lima. Más planes: una chifa china llamada ‘Madame Tusán’, una anticuchería ‘Panchita’, una juguería ‘La Pepa’ y un nuevo concepto de restaurante llamado ‘Chi Cha’. Además, una renombrada escuela, la Universidad Pachacútec, donde jóvenes de escasos recursos pueden formarse profesionalmente para la cocina. Y un concepto de hotel boutique, Nativa, que debuta cerca de Cuzco y tiene como condicionante tener como socios a comunidades nativas.

¿Un imperio gastronómico? Bueno, en todo caso este cocinero peruano no tiene, al menos visto desde afuera, aires de emperador. Lo cruzas en la barra de su cebichería La Mar y va como cualquiera. En su programa de ‘Aventura Culinaria’, que vi en un canal que parecía local, pero definitivamente no en ese de la ‘G’ verde que trato de evitar a toda costa, visita personas sencillas que cocinan para otras personas, mercados, puestos ambulantes, oscuras chifas de comida china. Enseña a comer la comida peruana a los propios peruanos. Promueve la gastronomía de su país como una marca internacional. Y va vestido de ciudadano común. Claro, eso no impide que también provoque críticas, algunas seguramente justificadas, y una buena dosis de envidia.

Una combinación que tal vez contribuya al éxito editorial de su ‘libro negro’. Pero… ¿Cómo se medirá el éxito de un libro así? ¿Cuántos lo comprarán? Eso si, decomprarlo, hay que tener una mesa para apoyarlo, o comprar una. Pero por ahora, al menos es mi caso, los libros los uso para leer, y las mesas para comer.

Un discurso académico de gastón Acurio encontrado por ahí
http://www.perupymes.com/modules/soapbox/article.php?articleID=8

 

por Luis Córdova

3 Comments

  1. Ya sospechaba que en Lima no solo te seducía la neblina y la poesía, sino su comida(no me gusta decir gastronomía), modificaría la palabra adobado por adorado, porque mucha gente ve a Gastón como un ícono. Pero creo que los verdaderos héroes y protagonistas son la inmensa mayoría de peruanos (as) que cocinan día a día con creatividad y bueno desde que tengo memoria, en cualquier casa siempre se destaca una receta especial y única.

  2. En el Peru en general contamos con una variedad invidiable de nuestra gastronomia por lo cual de la forma o estilo de comida llamese chifa,anticucheria,pollo a la brasa,comida criolla,cevicherias podemos armar y ofrecer todo un cadena de restaurant segun la variedad que encontramos cosa que otros paises no podran lograr y Gaston Acurio es el embajador de todo este movimiento.

Responder a Carmen Gutiérrez Cancelar respuesta

Tu dirección de correo no será publicada.


*