Martini seco
Esa tarde lluviosa no abrí la puerta del Harry’s Bar. Dejé que el sonido del agua corriendo como una redundancia por las calles de Venecia y el peso de una soledad inquietante llevaran mis recuerdos […]
Esa tarde lluviosa no abrí la puerta del Harry’s Bar. Dejé que el sonido del agua corriendo como una redundancia por las calles de Venecia y el peso de una soledad inquietante llevaran mis recuerdos […]
Luis Córdova